Hablar una lengua extranjera no es algo que salga de forma natural a todo el mundo. Hoy nos gustaría hablarte de algunos de los obstáculos mentales más comunes a los que se enfrentan los estudiantes de idiomas y que les suponen una dificultad a la hora de hablar. También te vamos a hablar de cómo superarlos y adquirir, así, más seguridad al hablar.
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Cómo superar los obstáculos que te impiden hablar una lengua extranjera
Para abordar el tema, Abbe va a presentarte a algunos de sus amigos. Cada uno de ellos se ha enfrentado a un obstáculo diferente, pero lo que tienen en común es que todos han tenido problemas con la expresión oral.
A ver si puedes identificarte con alguno de ellos. Incluso puede ser que identifiques algunos obstáculos que no te dabas cuenta que tenías.
1. No tener confianza en nosotros mismos
El caso de Maike:
Maike solía ser muy tímida, incluso cuando hablaba en su lengua materna, el alemán. Por eso hablar inglés era casi misión imposible para ella, le faltaba confianza en sí misma.
La sola idea de entablar una pequeña conversación en inglés se le hacía una montaña y se convencía a sí misma de que sería un desastre.
Tenía que relativizar las cosas… ¿qué es lo peor que puede pasar durante una conversación en una lengua extranjera?
Hay menos en juego de lo que te piensas. Si, por ejemplo, usas una palabra nueva, la pronuncias mal y la otra persona no te entiende, simplemente tienes que repetirla. Puede que tengas que acabar usando un sinónimo, pero eso no es problema. Incluso si ofendes a alguien sin querer, esa persona lo entenderá y sabrá que estás aprendiendo y que no ha sido a propósito.
Maike también necesitaba prepararse bien y formarse con buenos recursos.
Todas las herramientas de las que Abbe hablará en el vídeo te ayudarán a ganar la confianza necesaria en ti mismo para hablar cualquier idioma extranjero.
2. Tener miedo a equivocarse
El caso de Marco:
La siguiente persona a la que queremos que conozcas es Marco.
Lo que pasa es que Marco es muy perfeccionista, por eso usaba siempre frases muy simples y un vocabulario muy básico para no cometer errores. El problema con este tipo de comportamiento es que progresa.
Cuando se dio cuenta de que su perfeccionismo se había convertido en un obstáculo, escribió la siguiente frase en una hoja de papel: «nadie es perfecto». A continuación, pegó la nota en la nevera para que le sirviera de recordatorio.
También empezó a pedir a hablantes nativos que le corrigieran cuando hablaba.
Los errores son, de hecho, tus gran aliados. Que te corrijan a menudo te puede ofender, pero ese sentimiento negativo puede ser la mejor manera de recordar una palabra.
¡Marco convirtió su miedo a ser corregido en motivación! Ahora, crea flashcards en la aplicación de MosaLingua para todas las cosas con las que se equivoca y evitar, así, cometer el mismo error dos veces.
3. No buscar soluciones creativas antes las dificultades
Después está Marta. Marta es muy sociable y le encanta conocer a gente nueva y hablarles sobre la cultura española. Sin embargo, cada vez que tenía que hablar en inglés, se bloqueaba. Marta solía estresarse con dos cosas: cuando no entendía lo que le decían y cuando no sabía cómo responder. Por eso buscó herramientas para reducir el estrés.
En primer lugar, elaboró una lista de frases a usar en casos de emergencia que estudió y se aprendió de memoria para usar cuando no sabía qué decir.
Cosas como: «Can you say that more slowly, please?» y… «Can you spell that word?». Si nada funciona, siempre puedes buscar palabras en la aplicación de MosaLingua.
Para practicar, también empezó a usar palabras que conocía en vez de palabras que no sabía o no recordaba.
Si has jugado al Tabú alguna vez, sabrás que este puede ser un ejercicio bastante divertido. Si eres de esas personas a las que el estrés no les permite desenvolverse bien, como Marta, también puedes hacer ejercicios de respiración.
A veces, también es útil tener tu primera conversación en una lengua extranjera en un entorno controlado y seguro, como por ejemplo en una clase con un profesor particular. De este modo, sabrás qué reacciones esperar por parte de tu interlocutor.
4. Pensar que nunca aprenderemos otro idioma
Finalmente, te presentamos a Michel. Es conocido por ser un poco pesimista. Solía pensar que nunca llegaría a hablar bien inglés, que era demasiado difícil para él, por lo que nunca intentó aprenderlo.
Este es, básicamente, un problema de actitud. Si tú también eres pesimista, esfuérzate en centrarte en las cosas positivas.
Por ejemplo: haz una lista de todas las cosas buenas que puedes sacar de hablar una lengua extranjera. Céntrate en tu progreso y celebra las pequeñas victorias. Cuanto más hables, más mejorarás, lo que cambiará radicalmente tu actitud.
Si eres como alguno de los amigos de Abbe, ¡tienes que saber que no estás solo!
Hay muchas maneras de superar estos obstáculos que no te están permitiendo hablar con seguridad. Estamos seguros de que puedes convertirte en una hablante seguro de sí mismo.
Y si necesitas una ayuda extra, nuestra Masterclass «Habla inglés con confianza» te ayudará a enfrentarte a todos estos problemas, entre otros.
Cómo superar los obstáculos para aprender un idioma extranjero (VÍDEO)
Si te apetece, puedes ver el vídeo relacionado con este artículo. El vídeo está en inglés pero puedes activar los subtítulos en español en el icono de ajustes (abajo a la derecha).
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